El Carl
El padrino de la divulgación "moderna"...
Ahora todos dicen, "no es divulgación, es comunicación de la ciencia". Yo digo: ¡Pamplinas!
El señor don doctor Carl Sagan, tomó lo que todo mundo conocía y lo convirtió en una gran historia, la historia de nuestros deseos más profundos, el saber de dónde rayos venimos, qué hacemos en este tugurio de vicio y perdición y cómo es que no sirve de nada lo que hacemos porque simplemente somos un pálido y distante punto azul perdido en las profundidades del espacio y el tiempo.
Y sin embargo, trascendió más allá de los límites. Se convirtió en el proxeneta de la divulgación moderna, el mandamás de los niñitos que tienen un celular con cámara con el que se graban repitiendo lo que vieron en un video y se hacen "famosos".
¿Acaso se estará revolcando en su tumba Don Sagan, al ver la porquería en qué se ha convertido, no sólo la ciencia, sino sus profetas elegidos? Aquellos que quedaron encargados de llevar su palabra más allá del sistema Solar...
"¡Feliz día del divulgador!" Se atreven a clamar en los grupos y perfiles personales empapados de saganitis, sin darse cuenta que no están haciendo nada bien, más que besarse sus traseros entre ellos y dirigir sus esfuerzos a algo sin sentido: tratar de asignarle un género a la Ciencia...
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